La calle P es una de las más peculiares y, aunque no lo parezca de entrada, también una de las más complejas del Ensanche, en cuanto a su estructura interna. En el plano de Cerdà de 1859, tiene un discurrir relativamente sencillo: comienza en la coordenada número 11 (una calle que nunca llegó a construirse, situada justo antes de la actual calle de Tarragona [12]), experimenta una breve interrupción debida a una supermanzana pequeña destinada a edificios industriales o administrativos, y termina, al encontrarse con la ciudad vieja, aproximadamente en la coordenada número 22, la actual Casanova. Superado el casco viejo, reaparece en la coordenada número 30, la actual Pau Claris, y transcurre, ya sin interrupción, hasta la coordenada número 65, situada inmediatamente después de la actual rambla de Prim [64], y antes del proyectado Gran Bosque, ya en la zona del Besós.
En contraste con esta relativa placidez, el desarrollo actual de la calle P es de una gran complejidad. No tanto a la izquierda de la ciudad vieja, donde la calle ha sufrido, en realidad, una simplificación, ya que la supermanzana que la interrumpía desaparece rápidamente, en 1861, de los planos, y el tramo situado entre las coordenadas números 11 y 14 queda desestimado en 1891, de modo que la actual calle de Floridablanca [P] se desarrolla sin interrupciones notables, sino en la parte situada a la derecha del casco viejo, a partir de la calle de Pau Claris [30]: ahí es donde las cosas se complican de verdad.
A partir de ese punto encontramos, efectivamente, nada menos que siete tramos (lo que es extraordinario, absolutamente inhabitual), separados por dos interrupciones, y agrupados en dos denominaciones: Ausiàs Marc [P] y Bolivia [P]. Si no es nada común que una calle pase por dentro y por debajo de un edificio (son poquísimas las que lo hacen), a la que estamos estudiando le sucederá dos veces, primero al atravesar el edificio del Auditori y, después, el RBA. Tampoco es demasiado común que una calle transcurra a través de unos jardines, y en esos casos suele suceder que no se termina de saber muy bien si lo que estamos recorriendo son los jardines mismos o la calle en cuestión. Pues bien: en nuestro caso, pasaremos a través de unos jardines también dos veces, del mismo modo en que han sido dos los edificios que hemos atravesado: se trata de los jardines de la plaza de les Arts (por donde figura que la calle no pasa, o al menos ella carece, ahí, de nombre) y los de Ca l'Aranyó, por los que sí que pasa la calle, si tenemos que dar crédito al Portal d'Informació Urbanística.
La calle de Floridablanca [P], el primer tramo actual de la calle P, resulta más bien anodina, pero, sin embargo, la de Ausiàs Marc [P] ha sabido conservar algunos de los edificios más bellos del Ensanche modernista: es una de las primeras calles que se construyeron fuera de la ciudad vieja. La calle de Bolivia [P], que la continúa, comienza siendo una calle más bien industrial, pero enseguida pasa por el núcleo mismo del distrito 22@, donde se alternan los edificios ultramodernos y los edificios industriales reacondicionadas. Dejando atrás la zona, nuestra calle adquiere una vez más un aire industrial; enseguida encontramos la supermanzana de Can Ricart, comenzada a construir en 1853 (6), antes de la aprobación del proyecto del Ensanche; en su lado Besós podremos encontrar, no sabemos por cuánto tiempo, algunos de los mayores contrastes arquitectónicos de todo el Ensanche.
Superada la interrupción de Can Ricart, y justo antes de llegar a Selva de Mar [58], encontraremos un bellísimo parque lineal: la calle se ha convertido ahora, de repente, en un vergel tranquilo y lujuriante, casi completamente peatonal. Es una zona muy poco conocida y menos transitada, un jardin íntimo en un lugar recóndito, muy digno de ser visitado.
Después de una nueva interrupción, debida a una supermanzana de tipo industrial, embocamos ya en el tramo final de la calle. La última manzana, situada entre Puigcerdà [63] y la rambla de Prim [64], es un auténtico viaje hacia atrás en el tiempo: la calle de Bolivia [P] sobrevive allí, junto con los pasajes de Foret, Auger y Jubany, como vestigios de la denominada barriada de la Riera de Horta, construída en la década de 1920, una serie de callecitas estrechas bordeadas por casitas bajas, un lugar precioso, que no nos recuerda en nada al Ensanche, al que sin embargo pertenece.[1]
CONTENIDO
Letra P: Floridablanca, Ausiàs Marc, Bolivia
Aprobación del proyecto de Ensanche de Cerdà [18590607]
La calle P en la actualidad: un recorrido
Atravesando el Teatre Nacional de Catalunya por la plaza de les Arts
El primer tramo de la calle de Bolivia: del Poblenou al 22@
De Can Ricart a Selva de Mar, y el parque lineal
De Josep Pla a Prim, y la barriada de la riera de Horta
La efímera supermanzana entre 13 y 15 [1859-1861]
Inauguración de la estación de Vilanova (después conocida como estación del Norte) [18620521]
La calle P pasa a denominarse calle de Ausias March [18631219]
La calle de Ausias March en Las calles de Barcelona, de Víctor Balaguer
Desaparición de P entre 11 y 14 [18910219]
El segundo tramo de Ausias March pasa a llamarse calle de Bolivia [19420707]
Desaparición de la calle número 65 a la altura de P [19590512]
La supermanzana entre Selva de Mar y Josep Pla [19610324]
Cierra definitivamente la estación del Norte [19720923]
El Ayuntamiento adquiere los terrenos de la estación del Norte a RENFE [19830415]
Plan Especial de ordenación de la zona de la antigua Estación del Norte [19900620]
Inauguración del Teatre Nacional de Catalunya [19970911]
Inauguración del Auditori [19990322]
Observaciones a los nomenclátores
En el plano de Cerdà de 1859, la calle P está compuesta por tres tramos. El primero (señalado con el color azul) se extiende desde la coordenada número 11 (la proyectada calle de Llobregat, desaparecida en 1891) hasta la coordenada número 14 (la actual Vilamarí); ese tramo no corresponde a ninguna calle actual porque, como veremos, desapareció en 1891, con la aprobación de un nuevo plan urbanístico para la zona de La Fransa.
La primera interrupción se debe a una supermanzana de tamaño 2×3, la 13N⁄Q15, delimitada por las actuales Llança [13], Gran Vía [N], Entença [15] y Tamarit [Q] y cortada en su ángulo inferior izquierdo por el paso del Paralelo. No encontramos, en la actualidad, ningún correlato de esa supermanzana, que no llegó a construirse.
El segundo tramo (señalado con el color rojo en el plano) continua a partir de Entença [15] y se extiende hasta la actual Ronda de Sant Antoni, un poquito más a la derecha del cruce con la coordenada 22 (la actual Casanova). En ese punto comienza la ciudad vieja. El tramo corresponde, de un modo bastante aproximado, con la actual calle de Floridablanca [P].
La calle reaparece, superada ya la ciudad vieja, en su tercer tramo (señalado con el color verde en el plano), que comienza en la coordenada número 30 (la actual Pau Clarís), y se extiende, ya sin interrupción, hasta la coordenada número 65 (una manzana más allá de la actual Prim). Corresponde aproximadamente a las actuales calles de Ausiàs Marc [P] y Bolivia [P].
En la actualidad, la calle P está compuesta por ocho tramos. El primero (señalado con el color azul el el plano) es la calle de Floridablanca [P], y se extiende desde el Paralelo, en el cruce con Vilamarí [14], hasta la ronda de Sant Antoni, justo después del cruce con Casanova [22], donde queda interrumpida por la ciudad vieja.
El primer tramo de la actualidad es prácticamente igual al segundo de Cerdà, con la diferencia de que, al desaparecer la supermanzana 13N⁄Q15, el tramo empieza en Vilamarí [14] en vez de en Entenza [15]. Esa desaparición se produce en los planos manejados por el propio Cerdà y por el Ayuntamiento tan pronto como en 1861.
También ha desaparecido el primer tramo de Cerdà, situado entre la coordenada número 11 (la calle de Llobregat, que no llegó a abrirse) y la calle de Vilamarí [14]. Esa desaparición se produce en 1891, a raíz de la aprobación de un nuevo plan urbanístico para la zona de La Fransa.
La calle de Floridablanca [P] se hace notar más por lo que la atraviesa (la misteriosa Avenida Mistral, con su final abrupto, pues no lleva a ningún lugar; la calle del Comte Borrell [19], pacificada) o por lo que tiene cerca (el mercado de Sant Antoni y su correspondiente supermanzana) que por lo que ella misma es, ya que tiene un aire un poco soso, como un poco descuidado, y bastante aburrido. Probablemente se deba a la exagerada presencia de casas estilo Nuñez y Navarro, todas parecidas, anodinas, absolutamente carentes de personalidad.
Hay una construcción, sin embargo, que escapa a esta generalización: es la denominada casa de La Carbonería, que tiene la reputación de ser la más antigua del Ensanche, pues su licencia de obras se remonta al 1 de enero de 1864.[2] Hay que reconocer que no es especialmente hermosa, pero que sea la primera tiene algo de emocionante.
El segundo tramo, señalado con el color rojo en el plano, es la calle de Ausiàs Marc [P]. Comienza en la desembocadura de Pau Claris [30] en la plaza de Urquinaona, y se extiende hasta la calle de Lepant [41]. Es una calle plagada de preciosos edificios, puesto que la zona derecha del Ensanche fue de las primeras en construirse, y alberga muchos de sus edificios más emblemáticos. La siguiente fotografía, por ejemplo, es de la Casa de Madrid en Barcelona, un impresionante palacete, construido entre los años 1892 y 1895, y conocido como casa Tomàs Roger, cuyo arquitecto fue Enric Sagnier i Villavecchia.[3]
El plano de Cerdà proyectaba un único tercer tramo, que se extendía sin accidente alguno entre la actual Pau Claris [30] y la coordenada número 65, que no corresponde a ninguna calle actual, pues la calle número 65 no llegó a abrirse en esa zona del Ensanche, debido a la aprobación del Plan Parcial de 1859. En comparación con esa simplicidad, esa parte de la calle P se compone, en la actualidad, nada menos que de siete tramos, lo que incluye, además, dos interrupciones significativas; en este sentido, es una de las calles más complejas del Ensanche.
La siguiente fotografía recoge un detalle de la fachada de la impresionante casa Manuel Felip, sede de la Fundació Vila Casas, diseñada por Telm Fernández Janot.[4]
Entre Lepant [41] y Padilla [42], encontramos el edificio del Auditori, inaugurado en 1999, y entre esta última calle y la de Castillejos [43], el del Teatre Nacional de Catalunya, inaugurado en 1997. Es el tercer tramo de nuestra calle, señalado con el color verde en el plano.
Aunque Ausiàs Marc [P] termine en Lepant [41], el eficicio del Auditori es practicable caminando: se puede cruzar perfectamente desde Lepant [41] hasta Padilla [42], por el interior del edificio, sin más que rodear una construcción central, que podría ser el equivalente de una fuente en una plaza. En este sentido, podríamos decir que la calle no se interrumpe, sino que continúa, aunque ahora sin nombre, atravesando ese edificio.
Del mismo modo, es posible seguir en línea recta y atravesar la supermanzana que alberga el Teatre Nacional de Catalunya, entre las calles de Padilla [42] y Castillejos [43], pasando por los jardines de la plaza de les Arts. El legislador ha decidido, en este caso, que por aquí tampoco pasa la calle, pero se trata de algo completamente arbitrario; podemos decir que la calle pasa, aunque carezca de nombre.
Inmediatamente después del Teatre Nacional de Catalunya, comienza la calle de Bolivia [P]. En su primera parte, que se extiende desde Castillejos [43] hasta la calle de Roc Boronat [48], constituye el cuarto tramo, señalado con el color fucsia, de nuestro plano.
La totalidad de Bolivia [P] va a ser, de principio a fin, una calle de fortísimos contrastes, lo que la convierte en muy interesante. Nada más empezar, por ejemplo, encontramos un bar de los de toda la vida, el Racó del Poble Nou, y unas edificaciones bajas con aspecto industrial, seguidas, sin transición alguna, por un modernísimo edificio, que alberga la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Enseguida atravesamos Ciutat de Granada [47], y entramos en los Jardines de Ca l'Aranyó; nuestra calle de Bolivia [P] cruza los Jardines, por arriba, hasta llegar a Roc Boronat [48], donde termina nuestro tramo.
En este punto viene otra discontinuidad, que constituye el quinto tramo de nuestra calle, señalado en el plano con el color amarillo. En realidad, Bolivia [P] pasa por debajo del edificio RBA, situado al lado de los edificios Roc Boronat (perteneciente a la Universitat Pompeu Fabra) y Mediapro, que interrumpe la calle; es parecido a lo que sucede con el Auditori, pero en este caso sucede de un modo mucho más claro, menos discutible: la calle continua, pasando por un túnel. Otra cosa, quizá, será lo que opinen los de Correos, los del Catastro, etc., pero son cosas que, para nosotros, tienen un interés muy limitado, más allá de que nos propongamos consignarlas.
El sexto tramo de nuestra calle, que hemos señalado con el color azul pálido en el plano, comienza una vez atravesado el edificio RBA, en la Diagonal, un poco antes de la calle de la Llacuna [49], y se extiende, atravesando la rambla del Poblenou [50], la calle de Sant Joan de Malta y la cortísima calle de Castella [51], hasta la de Bilbao [52], donde queda interrumpido por el recinto industrial de Can Ricart,[5] que ocupa una supermanzana delimitada por la propia calle de Bilbao [52] y las de Perú [P], Espronceda [54] y Marroc [Q].
Si observamos la anterior fotografía, tomada en el cruce de Bolivia [P] con Bilbao [52], podemos apreciar cómo el edificio que se está construyendo respeta la alineación montaña de Bolivia [P]: la calle, pues, continuará, aunque sea en parte, hacia dentro del recinto.
Una vez en el otro lado de Can Ricart, comienza, en la calle de Espronceda [54], el séptimo tramo de nuestra calle, señalado en el plano con el color fucsia pálido. Justo antes de esa calle, encontramos unos increibles edificios industriales, pertenecientes todavía a Can Ricart, y situados en medio de la calle de Bolivia [P], lo que produce un efecto francamente extraño, aunque muy interesante.
Después de dos manzanas más o menos «normales», a partir de Fluvià [56] y hasta Selva de Mar [58] encontramos un precioso parque lineal, que parece una resonancia del que se está desarrollando dos calles más abajo, en Cristóbal de Moura [R]. El parque bordea por encima el recinto de La Escocesa, que se remonta a 1852.[6]
A nuestra derecha encontramos el edificio de La Escocesa, que aguarda su rehabilitación. Enseguida llegamos a la siguiente interrupción, causada por una supermanzana de tipo industrial: se halla en Selva de Mar [58], donde encontramos una serie de casitas bajas, algunas de las cuales dan también a un pasaje privado, al que puede accederse por el número 383 de Pere IV.
Una vez superada la interrupción, nos encontramos ya a la altura de Josep Pla [61]. Ahí volvemos a encontrar nuestra calle, en su octavo y último tramo, señalado en el plano con el color verde pálido, y que se extenderá hasta la rambla de Prim [64], donde la calle P termina.
Volveremos a encontrar la calle, pero, en este caso, y al principio, de un modo un tanto fragmentario. La primera señal de que estamos reconectando con Bolivia [P] la tenemos en un lugar inesperado, en el centro de Jardinería A Cal Agustí, situado en una antigua masía, edificada en 1945.[7] Si observamos el edificio con atención, veremos que no está alineado con Pere IV, sino con... Bolivia [P] y Agricultura [60]. La fachada de A Cal Agustí es, precisamente, el chaflán de la manzana, que exhibe su tamaño estándar, de veinte metros.
En el lado mar, reencontraremos Bolivia [P] después de la vieja fábrica de Colores Hispania, diseñada por Josep Graner i Prat y construída en 1923, lamentablemente muy mal conservada. En su lado izquierdo encontramos dos placas de rotulación casi juntas: una para Pere IV, y otra para Bolivia [P].
Hasta Puigcerdà [62], Bolivia [P] está ocultada por una serie de vallas; en la zona se está construyendo intensamente. Al llegar a Puigcerdà [62], encontramos la vieja fábrica de Ca l'Illa, reacondicionada, que alberga varias actividades.[8]
Una calle más, y estamos ya en Maresme [63]. Ahí nos espera una sorpresa, un último contraste, con el que termina también la calle. Bolivia [P], efectivamente, se estrecha entre Maresme [63] y Prim [64]: forma parte de una pequeña barriada, la primera construida en la zona, delimitada por Pere IV, Maresme [63], Prim [64] y Marroc [Q]. Además de las calles de Bolivia [P] y Marroc [Q], que en esa zona tienen más bien un aire de pasaje, la barriada contiene los pasajes propiamente dichos de Foret, Auger y Jubany. En conjunto se construyó en la década de 1920, y fue conocido como la barriada de la Riera de Horta: es que la actual Prim [64] resulta ser, precisamente, el encauzamiento de esa riera.[9]
La supermanzana 13N⁄Q15 sólo aparece en el plano de Cerdà de 1859 y en los demás planos que lo tomaron como base, pero ya no lo hace en un plano posterior, firmado por el propio Cerdà y fechado en 1861, ni en los planos oficiales del Ayuntamiento, que parecen, al respecto, haberse basado en este último. Para no reproducir la totalidad de la información aquí, nos permitiremos remitir al lector a lo que decimos sobre el tema en la ficha de la calle vecina, la de la coordenada O, donde abordamos el tema con el detenimiento que merece.
El día 21 de mayo de 1962, se inaugura en Barcelona la estación ferroviaria de Vilanova, que pasó a ser conocida más tarde con la denominación de estación del Norte.[10] El crecimiento del tráfico ferroviario hizo que se terminasen creando cocheras y una zona de maniobras en los terrenos comprendidos entre las calles de Lepanto [41] y Cartagena [44] (hoy Àlaba [44]) y situados por debajo de la calle de Ribas. De este modo, la calle de Ausias March [P] empezó a quedar interrumpida a partir de Lepanto [41].
Esos terrenos pasaron, en 1983,[11] a ser propiedad del Ayuntamiento; en ellos se ha construido el Auditori, el Teatre Nacional de Catalunya y el mercado dels Encants. La interrupción de la calle de Ausiàs Marc [P] a la altura de Lepant [41] pasó, así, a ser definitiva.
El 19 de diciembre de 1863 se produce la primera asignación de nombres a calles del Ensanche por el Ayuntamiento de Barcelona. Entre ellos, se asigna nombre a la calle P: Ausias March.
La de la letra P. de Ausias March. Celebre poeta catalan llamado el Petrarca provenzal.
El 28 de octubre de 1864, menos de un año después del primer bautizo de calles de Barcelona, se asigna un nombre distinto a la parte de la calle situada a la izquierda del casco viejo: calle de Floridablanca [P]. Para comprender la prontitud de este cambio, valorar su significación y poder discutirla, nos permitiremos remitir al lector a las explicaciones que damos para la denominación de Sepúlveda para calle O, que juega, con respecto del primer nombre de esa calle, Caspe [O], un papel similar al que Floridablanca [P] juega con respecto de Ausias March [P].
La que está señalada en el plano con la letra P. situada en la misma parte que la anterior [á la parte de poniente de la Ciudad], se denominará calle de Floridablanca. Celebre Ministro en el Reinado de Carlos III.
Las aclaraciones entre corchetes son nuestras.
Hemos añadido [entre corchetes] los números de las calles para facilitar la referencia.
Será otra de las calles de la nueva Barcelona.
[...]
Las calles de Barcelona. Tomo I (3, p. 86).
En este caso, Balaguer se centra en el nombre de la calle y su significación, y omite cualquier referencia a la posición de la calle, al listado de las otras calles con las que se cruza, etc.
Reproducimos entera, debido a su extraordinario interés, la ficha de Balaguer para la calle de Floridablanca (como es nuestra costumbre, hemos añadido [entre corchetes] los números de las calles para facilitar la referencia). Por lo visto, Balaguer no estaba muy de acuerdo con lo que el Ayuntamiento había hecho con sus sugerencias, y aprovecha esta ficha para desahogarse, lo que nos permite tener un atisbo bastante completo de cuáles habían sido sus planes. Es muy llamativo que haya escogido esta ficha, un tanto recóndita, para ventilar sus desacuerdos.
Es una de las del ensanche. Parte de la calle de Ronda en dirección á Monjuich, atravesada por las de Muntaner [23], Casanovas [22], Villaroel [21], Urgel [20], Borrell [19], Viladomat [18], Calabria [17], Rocafort [16], Entenza [15], Vilamarí [14] y Llansa [13].
Quejándose el señor Pi y Arimon en su Diccionario de calles y plazas de Barcelona, que solo tiene el defecto de ser muy concreto, pues, á no ser así, hubiera hecho inútil la presente obra, de ciertos nombres estrafalarios y ridiculos puestos á algunas calles, esclama: «Nombres de preclaras familias, de hechos é instituciones célebres conserva la historia de Barcelona, que harto merecen los honores de que se les dedique una calle para eterna memoria y ejemplo de las genendones presentes y futuras. El hacerlo asi vendría á ser un medio sencillo é indirecto de popularizar los conocimientos históricos, y de despertar en cierto modo la afición de algunos á aquellos estudios. Consignamos aquí esta idea refiriéndonos en general á todas las calles que de nuevo se abran en lo sucesivo.»
Teniendo en cuenta este consejo, y abundando en las mismas ideas, cuando se trató de bautizar las calles de la nueva Barcelona, el autor de esta obra envió al Ayuntamiento una larga lista de nombres, relativos todos á hechos históricos del Principado, y tuvo la suerte de que la gran mayoría de ellos fuesen aceptados para dar nombre á las nuevas calles, escepto algunos pocos que por razones especiales, que el autor hubo forzosamente de respetar, fueron sustituidos por el cuerpo municipal con los de Floridablanca [P], Sepúlveda [O], Enna [R], Campo Sagrado [T], Pelayo, Vergara, Ronda, Trafalgar y otros.
No están ciertamente mal aplicados estos nombres, sustituidos á los que para estas calles había dado el autor, pero puesto que la ocasión lo trae, bueno será prevenir futuras criticas diciendo que cuando el autor de estas líneas se encargó de poner nombres á todas las calles del ensanche, concibió el plan de que todos fuesen acomodados á hechos, glorias é instituciones pertenecientes á la historia de Cataluña, á fin de formar un conjunto general, histórico y armónico. Fué espuesto el plan á uno de los señores concejales que formaban la comisión del Ayuntamiento encargada de dar dictámen, y mereció por completo la aprobación de aquel ilustrado individuo del cuerpo municipal. No fué culpa suya, ni mucho menos del autor de estas lincas, si el plan dejó de realizarse por completo á causa de no haber sido aprobados todos los nombres.
De todas maneras, si bien ahora necesariamente ha debido quedar incompleta la idea que se propusiera el autor de esta obra, pues que del conjunto de todos los nombres hubiera aquella resaltado clara y evidente, sin embargo, el plan concebido puede conocerse bastante por los nombres que han sido respetados en las calles del ensanche, nombres que nos permitiremos reunir aquí en algunas agrupaciones para que el lector pueda hacerse cargo en parte del pensamiento que presidió á su eleccioa.
Así por ejemplo, la antigua Corona de Aragón, su poderío y su importancia, están representados por los nombres de las calles que llevan los de aquellos estados y naciones que la formaban, unas por lazo federal, otras por anexión ó por conquista: Aragón [L], Cataluña, Valencia [K], Mallorca [J], Rosellon [H], Provenza [I], Sicilia [38], Nápoles [37], Calabria [17], Córcega [G] y Cerdeña [39].
Los orígenes de la patria catalana est´qn recordados por la calle que lleva el nombre de los condes de Urgel [20]; y la que lleva el de Villena [Z] recuerda, al propio tiempo que á un literato ilustre, al último descendiente de la familia que se sentó en el trono de la Corona de Aragón.
Traen á la memoria las glorias populares y cívicas de la nacionalidad catalana y sus libres instituciones los que tienen los nombres de Cortes [N], Parlamento [S], Diputación [M], Consejo de ciento [Ll]; recuerdan á sus célebres magistrados y á sus grandes hombres políticos las que guardan los nombres de Pablo Clarís [30] el diputado edesiásiico, Tamarit [Q] el diputado militar, Casanovas [22] el último conceller, Fontanella el gran jurisconsulto; conmemoran sus glorias literarias y cientificas las que ostentan los nombres de Ausias March [P] el poeta valenciano, Ramon Llull [V] el poeta mallorquín, Aribau [24] el moderno poeta catalán, Montaner [23] y Pujades [U] los cronistas, Vilanova [R] el gran filósofo antiguo, Balmes [26] el gran filósofo moderno, Ali-Bey [Q] el viajero ilustre, Viladomat [18] el eminente pintor; consignan sus glorias militares las que recuerdan los nombres de Borrell [19] el conde que consolidó su independencia, de Pallás [T] el valiente capitán que tanto lidió por las libertades patrias, de Roger de Flor [36], Entenza [15] y Rocafort [16] caudillos famosos de la celebre espedicion á Oriente, Villaroel [21] el heroico defensor de Barcelona en 1714; y por fin despiertan el recuerdo de sus glorias marítimas las que llevan inscritos los nombres de los célebres almirantes Roger de Lauria [31], Conrado de Llanza [13] y Bernardo de Vilamarí [14].
Por lo que toca á las glorias de la Cataluña moderna, recordadas están por los nombres del Bruch [32], teatro de la humillación de las águilas francesas; Gerona [33] y Tarragona [12], las ciudades que aquí supieron mejor y mas heroicamente resistir á los estranjeros invasores; Manso [X], el mas famoso caudillo de la guerra de la indepencia; y Gualdrás ó Vad-Ras [Y], la última batalla de Africa donde tan inmarcesible gloria adquirieron los voluntarios catalanes.
Falta solo ahora decir que hay otras tres calles, con cuyos nombres se ha prestado debido tributo al Comercio, á la Marina [40] y á la Industria de Baroelona, tres ramos importantes de que siempre, desde remotas épocas, se han mostrado orgullosos los catalanes, debiendo á ellos altas y memorables glorias, no menos honrosas por cierto que las alcanzadas en los campos de batalla.
A estar continuados los diez ó doce nombres mas, que hubieron de suprimirse por causas que no son de este lugar, el lector hubiera podido juzgar de como el plan que nos habíamos propuesto era completo, y de como se habla procurado no olvidar ninguna representación gloriosa para dejar bien dibujada la fisonomía histórico-polílica de Cataluña.
Las calles de Barcelona. Tomo I (3, pp. 433–5).
La ficha no tiene desperdicio. Balaguer no dice ni una sola palabra sobre Floridablanca: está claro que su «respeto», además de «forzoso», era más bien superficial: «No están ciertamente mal aplicados estos nombres [...]». Pero, sin duda alguna, la enumeración que hace, así como las agrupaciones que propone y la lógica que los atraviesa, son todos de un extraordinario interés.
Balaguer cita algunas de las calles con cuyos nombres no está de acuerdo, y después añade «y otros». Si tomamos la lista de los números y de las letras, y eliminamos las que Balaguer reconoce como propias en la lista, obtenemos lo siguiente:
Además de todo esto, claro está, Floridablanca [P] no cruza Muntaner [23]. Pero Balaguer nunca se llevó muy bien con el plano de Cerdà, lo vemos casi en todas sus fichas.
El día 19 de febrero de 1891, el Ayuntamiento aprueba el proyecto de urbanización del barrio de La Fransa presentado por Josep Amargós. Dicho proyecto elimina las manzanas cerdanianas situadas a la izquierda del Paralelo y por debajo de la Gran Vía [N]; en particular, el tramo de la calle de Floridablanca [P] situado entre Puigcerdà [11] (nuevo nombre de la anterior calle de Llobregat [11]) y Vilamarí [14] desaparece.
El 7 de julio de 1942, el Ayuntamiento decide redenominar una serie de tramos de determinadas calles de Barcelona. En particular, el tramo de Ausias March [P] situado a la derecha de la Plaza de las Glorias pasa a denominarse calle de Bolivia [P].
El día 12 de mayo de 1959 se aprueba definitivamente el Plan Parcial del poblado sudoeste del Besos [PiuBCN SM232], que rediseña la zona situada a la derecha de la calle de Prim [64] (Prim sólo fue una rambla a partir de 1989) y por debajo de la Gran Vía [N], de un modo tal que se elimina cualquier pretensión de estar siguiendo los parámetros del Ensanche de Cerdà. En particular, la calle que sigue a Prim [64] por la derecha, la de Alfonso el Magnánimo, no está alineada como debería para ser, como Cerdà dibujó, la calle número 65. De hecho, esa calle ha desaparecido, en esa zona (no así por encima de la Gran Vía [N], donde sobrevive parcialmente, bajo el nombre de calle de Ca n'Oliva [65]), lo que lleva a nuestra calle P, que en ese punto se llama calle del Bolivia [P], a terminar en Prim [64].
El día 24 de marzo de 1961, se aprueba definitivamente el Plan Parcial de ordenación de la zona de Levante (sector Sur) [PiuBCN SM243], que proyecta una supermanzana triangular delimitada por Selva de Mar [58], General Manso [61] (hoy Josep Pla), Perú [O] y Pedro IV. Esa supermanzana signe existiendo en la actualidad, e interrumpe la calle de Bolivia [P].
El día 23 de septiembre de 1972, poco después de las diez de la noche, entró en la estación del Norte el último tren de viajeros. A partir de aquí, el destino de la estación y, lo que nos importa más en este artículo, de sus cocheras y de las vías que constituían su zona de maniobras, comienza a ser otro, en un camino que va a ser más bien largo: durará aproximadamente nada menos que veintisiete años.
Las ciudades se transforman, pero lo hacen a cámara lenta. Veintisiete años son muchos años y, sin embargo, es el tiempo que media entre ese último tren, que llegó, unos minutos más tarde de las diez de la noche del sábado 23 de septiembre de 1972, a la antigua Estación del Norte, y el lunes, 22 de marzo de 1999, día en que se produce la inauguración del Auditori. Por eso a veces se escuchan determinadas cosas, sobre la ciudad, que dan un poco de risa: es que desconocen, absolutamente, la historia, la manera de funcionar de la ciudad —de cualquier ciudad—, de sus velocidades, de sus ritmos. Las transformaciones suceden, sí, acontecen, se producen, claro que sí; pero, en general, son lentas, no van nada deprisa. Hay que tenerlo en cuenta.
Veintisiete años, entonces. Esbozemos, muy rápidamente, su contorno.
En primer lugar, el día 17 de julio de 1976, se aprueba definitivamente el Plan General Metropolitano [PiuBCN PGM]. Los terrenos correspondientes a las cocheras y la zona de maniobras de la antigua Estación del Norte aparecen con los siguientes códigos de identificación: (6a), Parques y jardines urbanos actuales de carácter local; (6c), Parques y jardines urbanos actuales y de nueva creación a nivel metropolitano; (7a), Equipamientos comunitarios y dotaciones actuales; (7b), Equipamientos comunitarios y dotaciones de nueva creación a nivel local; (8a), Verde privado protegido; (9), Protección de sistemas generales, (22a), Industrial.
A continuación, el día 15 de abril de 1983, el Ayuntamiento adquiere una serie de terrenos a la «Red Nacional de Ferrocarriles Españoles» (RENFE), entre los que se hallan los relacionados con la antigua estación del Norte; ello incluye también las cocheras y la zona de maniobras, en las que se edificará, más adelante, el Auditori (inaugurado en 1999), el Teatre Nacional de Catalunya (inaugurado en 1997) y el mercado dels Encants (inaugurado en 2013).
Siete años más tarde, el día 20 de junio de 1990, se aprueba el Plan Especial d'ordenació del sistema d'espais i equipaments del sector nord-Glòries, que afecta a la antigua Estación del Norte, a sus cocheras, y a su zona de maniobras. En los planos que acompañan al Plan Especial, podemos encontrar ya el diseño casi actual de la Estación, del Auditori y del Teatre Nacional de Catalunya.
Finalmente, tras esperar siete años más, el día 11 de septiembre de 1997, se inaugura la sede del Teatre Nacional de Catalunya. El Teatre está compuesto de dos edificios: el principal, que acoge la Sala Gran y la Sala Petita, tiene forma de templo griego; su parte mar permite el paso, a través de la plaza de les Arts, a la prolongación de la calle de Ausiàs Marc [P], que antes habrá tenido que atravesar el Auditori por su interior, y se dirigirá después a su continuación, la calle de Bolivia [P].
Y, por último, el día 22 de marzo de 1999, se inaugura la sede del Auditori de Barcelona, situada en la calle de Lepant [41]. El edificio, como hemos visto, está construído de tal manera que es posible atravesarlo por su mitad, como si la calle continuase por debajo, y pasar al otro lado, de modo que no queda claro del todo si la calle, que en ese punto carece de nombre, continúa, o termina donde empieza el edificio.
Nom: | Ausiàs Marc, carrer d' |
Descripció: | Ausiàs March o Ausies March (Gandia, vers el 1397 - València, 1459). Poeta. Cant espiritual es considera una de les obres cabdals de la poesia catalana. La seva poesia tingué una important repercussió en la lírica castellana dels segles XVI i XVII. |
Fonts documentals: | {n80}. |
Data Aprovació: | 25/10/1863 |
Abans trad.: | |
Noms anteriors: | Lletra P (Pla Cerdà) |
Districtes: | EIXAMPLE (02) |
El nombre antes de la traducción debería ser «Ausias March», y la fecha de aprobación, 19/12/1863.
Nom: | Bolívia, carrer de |
Descripció: | Estat d'Amèrica del Sud que limita amb el Brasil, amb el Paraguai, amb l'Argentina, amb Xile i amb el Perú. |
Fonts documentals: | {n80*}. |
Data Aprovació: | 07/07/1942 |
Abans trad.: | |
Noms anteriors: | Ausias March [2n tram], abans de 1900 | Lletra P [Pla Cerdà] |
Districtes: | SANT MARTÍ (10) |
El campo de nombres anteriores debería ser «Ausias March [2n tram], 19/12/1863 | Lletra P [Pla Cerdà]».
Nom: | Floridablanca, carrer de |
Descripció: | José Moñino y Redondo [Múrcia, 1728 - Sevilla, 1808]. Estadista. Famós pel cens que ordenà fer a l'Estat espanyol l'any 1787. Posseïa el títol de comte de Floridablanca. |
Fonts documentals: | {n80*}. |
Data Aprovació: | (Abans de 1900) |
Abans trad.: | |
Noms anteriors: | |
Districtes: | EIXAMPLE (02) |
La fecha de aprobación debería ser 28/10/1864, y el campo de nombres anteriores «Ausias March, 19/12/1863 | Lletra P [Pla Cerdà]».
Joan Batet, Mireia Monforte, Fabián Ortiz y David Palau han leído algunas de las versiones avanzadas de este artículo y han ayudado a mejorarlo notablemente con sus impresiones y sugerencias. Le estoy muy agradecido.
Determinados planos que se encuentran en este artículo pueden no aparecer en la siguiente lista mientras terminamos de completar algunas migraciones.
(1) | Josep Amargós i Samaranch. Urbanización de La Fransa. Plano general (31/05/1890) [AMCB Q177 3 R6568]. url: https://catalegarxiumunicipal.bcn.cat/ms-opac/permalink/1@1387543 ↩ |
(2) | Ildefons Cerdà i Sunyer. [Plànol de l'Eixample amb el traçat definitiu de la xarxa viària] (1861) [AHCB 16750]. url: https://catalegarxiumunicipal.bcn.cat/ms-opac/permalink/1@590074 ↩ |
(3) | Ildefons Cerdà i Sunyer y Pere Roca. Plano de los alrededores de la ciudad de Barcelona y proyecto de su reforma y ensanche (abril de 1861) [ICGC RM.267960]. url: https://cartotecadigital.icgc.cat/digital/collection/catalunya/id/1804/ ↩ |
(4) | Vicenç Martorell i Portas. Barcelona: B2-1 (1927) [AMCB Q162 R.4800]. url: https://catalegarxiumunicipal.bcn.cat/ms-opac/permalink/1@1343037 ↩ |
(1) | Ajuntament de Barcelona. Llibre d'Actes del Consell Plenari 1863. Anual. AMCB A134 45-1863. Barcelona, 1863. url: https://catalegarxiumunicipal.bcn.cat/ms-opac/permalink/1@1001424 |
(2) | Ajuntament de Barcelona. Llibre d'Actes del Consell Plenari 1864. Anual. AMCB A134 46-1864. Barcelona, 1864. url: https://catalegarxiumunicipal.bcn.cat/ms-opac/permalink/1@1001425 |
(3) | Víctor Balaguer. Las calles de Barcelona. Tomo I. Disponible en línea en Google Books. Barcelona: Salvador Manero, 1865. |
(4) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Ca l'Agustí». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=30302 (visitado 2022-04-25). |
(5) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Ca l'Illa - Vicente Illa S.A.». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=42459 (visitado 2022-04-25). |
(6) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Can Ricart». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=34819 (visitado 2022-04-25). |
(7) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Casa Manuel Felip». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=40299 (visitado 2022-04-25). |
(8) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Casa Tomàs Roger». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=40303 (visitado 2022-04-25). |
(9) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Estació del Nord». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=40487 (visitado 2022-04-25). |
(10) | Direcció General del Patrimoni Cultural. «Fàbrica La Escocesa». En: Inventari del Patrimoni Arquitectònic. url: http://invarquit.cultura.gencat.cat/Cerca/Fitxa?index=0&consulta=&codi=41230 (visitado 2022-04-25). |
(11) | Jesús Fraiz Ordóñez. «Estación del Norte - Estació del Nord / Hoy / Barcelona Norte - Barcelona Nord». En: La Barcelona de antes. url: https://labarcelonadeantes.com/norte.html (visitado 2022-04-20). |
(12) | Sergi Hernández. «La Carboneria, l’edifici més antic de l’Eixample». En: betevé (16/02/2021). url: https://beteve.cat/va-passar-aqui/la-carboneria-casa-tarrago-edifici-mes-antic-eixample/ |
(13) | Patricia Pujante. «L'antiga barriada de la Riera d'Horta reclama millores». En: El Poblenou. Publicació de l’Associació de Veïns i Veïnes del Poblenou (02/2016). url: https://www.elpoblenou.cat/images/N90GEN2016.pdf |
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